Antes de empezar quiero hacer dos precisiones, la primera que tal vez no sea muy objetiva a la hora de hacer una reseña ya que este libro cuenta con dos puntos a favor a priori: Es una novela de Tim Powers y es una historia de piratas. La segunda precisión es que al libro lo leí en formato digital, ya que no pude conseguirlo y eso hizo que me llevara más tiempo del que me hubiera llevado si lo tuviera en formato papel (estoy segura de que lo hubiera leído en dos días)
Hecho estas aclaraciones arranco con la reseña.
Libro: En costas extrañas
Una extraordinaria novela de fantasía histórica centrada en la piratería del siglo XVIII en el Caribe.
1718. Barbanegra, uno de los últimos piratas que se enfrentaron a la flota del rey Jorge de Inglaterra, aterroriza las costas del Caribe. En tan desagradable compañía y en contra de su voluntad, navega John Chandagnac, tenedor de libros y titiritero. No parece un buen candidato a pirata ni alguien dado a las oscuras maquinaciones de la hechicería, pero un capitán borracho lo rebautiza como Jack Shandy y llega a convertirse en uno de sus líderes... con precio puesto a su cabeza.
Tim Powers nos ofrece de nuevo un apasionante relato de fantasía histórica en el que mezcla con su pericia característica el detalle histórico y los tópicos más desquiciados de la narrativa fantástica para construir un cóctel de acción de ritmo vertiginoso. La caza de espíritus con ayuda de un perro de dos cabezas momificado, un viaje a través de los pantanos de Florida en busca de la Fuente de la Eterna Juventud, una batalla naval con la Marina Real inglesa, encuentros con buques naufragados cuya tripulación está compuesta por zombies... son algunas de las imágenes que pueden encontrarse al navegar por «costas extrañas».
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Reseña
No sé bien que esperaba encontrar en este libro cuando empecé su lectura, ¿fantasía? ¿Aventuras? ¿Humor? … lo que se, fue que me encontré con una fascinante fantasía histórica y no exagero al decir que es de las mejores novelas de piratas que he leído en mi vida.
Tim Powers nos presenta una novela ambientada en el siglo XVIII, en la época de oro de los piratas en las costas del Caribe. En ella el protagonista de esta historia el joven John Chandagnac sin ningún talento especial en apariencia, se ve envuelto en un mundo que nunca hubiera imaginado y así sin pensarlo ni proponérselo pasa de ser John Chandagnac a ser Jack Shandy, de titiritero a cocinero y de cocinero a ser uno de los piratas más buscados.
Una de las cualidades del autor es mostrarnos este relato de fantasía utilizando una época histórica como fondo, de manera tan verosímil que casi no puedo imaginarme la historia de otra manera distinta a como lo describe en sus páginas. Por otro lado el estilo de narración es impecable y vertiginoso. Si estas buscando acción no dudes en leerlo porque si hay algo que en este libro abunda, son las aventuras, mil peripecias que debe atravesar el protagonista para cumplir el objetivo, hasta el punto que uno se encuentra pensando “por favor dale un descanso”.
Hay, magia, vudú, muertos resucitados, fantasmas y muchas batallas, no es de extrañar que hayan comprado los derechos para la nueva película de Piratas del Caribe, en este libro abunda material.
Sobre los personajes:
Los personajes están bien logrados, los “malos” y los “buenos” (dependiendo del ojo que se mire) me generaron empatía, quizás el único personaje con el que no me conecte fue con la protagonista femenina que cumplió el típico rol de damisela en apuros, sin embargo no creo que otra personalidad hubiera cuajado en la historia.
Los personajes secundarios me cautivaron desde los que tenían más relevancia en la historia, como Barbanegra “el azote de los mares” o Phill Davies, hasta aquellos que si bien tienen importancia en la historia aparecen menos, como el enigmático Gobernador de Nueva Providencia (la isla de los piratas).
Powers te presenta a los personajes con tanta naturalidad que uno va volcando sus simpatías para uno otro lado sin la necesidad de recurrir a adjetivos exagerados... Tampoco te presenta una visión idílica o romántica de los piratas, son como una se imagina que tienen que ser, con todas sus miserias y virtudes, más miserias que otra cosa y esto fue un alivio porque ya estaba cansada de esta nueva onda de presentarte a personajes oscuros que otrora formaban parte de las pesadillas, para transformarse en versiones modernas de príncipes valientes de cuentos de hadas.
En cuantos a los personajes a quien odiar, los hay, sobre todo uno que me genero tanta repugnancia (no voy a decir quién para no adelantar la historia), y el autor lo logra –como marque anteriormente- con tanta naturalidad sin necesidad de decir cada 5 palabras lo malo que es.
Momentos memorables:
Hay muchos momento memorables pero la mayoría me la voy a reservar porque adelantan la historia, pero hay algunos que me vienen a la mente como cuando el protagonista hizo un teatro de títeres en la Isla de Providencia o cuando los piratas son atacados por la Armada real y el protagonista cree que puede ser salvado de esa vida de pirata que no había elegido:
"...Shandy lo hizo, mientras escuchaba como, tras él, los piratas discutían malhumorados sobre si era un traidor cobarde o un traidor pragmático"...
Y en cuanto al final, es uno que promete nuevas aventuras y a una que no le gustan las sagas, en este caso espera con ansias que la pluma de Powers vuelva a las andadas con estos piratas.
Para terminar esta reseña contenida (me es tan difícil reseñara sin contar la historia) solo me queda reiterarles la invitación de la sinopsis, de subirse a bordo del Jenny comandados por Jack Shandy para buscar la fuente de la eterna juventud, embriagados de ron, surcando los mares del Caribe hasta anclar en costas extrañas.
4.5/5
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